martes, 3 de marzo de 2009

Esperando al astrólogo




Sí, te cruzás a Ergueta y a Erdosain en un bar, parás la oreja y te das cuenta que están planeando una revolución. Ellos te miran, Erdosain te mira fijo y te pide que te sientes con ellos te ofrecen ginebra, te cuentan que Haffnner murió, que necesitan plata. Le faltan dos lucas para terminar la fábrica de gas veneno y te las piden!
(Llenás otra vez el vaso)
Vos sin laburo, te proponen participar de un hecho fraudulento, como asaltar una estación de servicios!
Hablan de una revolución social, hablan de un astrólogo de Temperley que suena más bien a un personaje mitológico, alguien que quiere cambiar el mundo pero a la fuerza…
Vos recordás un libro que te recomendaron hace un tiempo, uno que jamás leíste. Todo eso te suena… Seguís sentado, acomodado, escuchando cómo tejen discursos en el aire, cómo se va armando todo frente a vos en la mesa, en el bar, una utopía… un sueño… de siete personas!
(Pedís otra botella de ginebra)
De repente un tipo serio con porte de general entra al bar. Erdosain lo mira, Ergueta parece preocuparse. Este tipo encara hacia la mesa, Erdosain se para… lo saluda y lo presenta como el buscador de oro…Ergueta se tranquiliza…pasándose el pañuelo por la frente…
Erdosain dice: ¿y si empezamos por sacar el oro nosotros y con esa plata terminamos la fábrica?
La idea no le gusta al buscador de oro, propone esperar al Astrólogo. Otra vez escuchás ese apodo ¿será real?, te preguntás para tus adentros.
(La ginebra se vuelve agua)
Seguís sentado esperando que un milagro que te saque de la conversación, del bar…
Dos tipos relojean desde la puerta, uno tiene una máscara de gas en la mano, el otro lentes negros; es ciego pensás en primera instancia. Al ver a Erdosain entran, se sientan sin saludar. El supuesto ciego dice: “Hace dos días que no como”, Erdosain llama al mozo y le pide un sándwich de salame y queso.
-Está todo- dicen- ya falta poco…
Vos ahí, en el aire. La ginebra por la mitad.
Ergueta nervioso se sirve otro vaso, te convida y no te negás.
El barullo era insoportable, se hilaba una filosofía bizarra, el aire estaba ya muy espeso, en un momento oís hablar de una misteriosa rosa de cobre.

Ruidos de bala, en la puerta una frenada, luces azules, gritos, todos al suelo, vidrios rotos, un cadáver tirado en la puerta. Erdosain murmura: - Agarraron al Astrólogo-; se va por la puerta de atrás. La policía entra, agarran a los demás. Ergueta grita que no tenía nada que ver, el buscador de oro se levanta y se va caminando sin levantar la perdiz; zafa. El de la máscara de gas es violentamente golpeado y esposado, el falso ciego sale lento chocando las mesas.
Y cuando el policía se acerca a vos, con la macana en la mano…
----------------------------------------------------------------------------------------------

El mozo te dice:
-¡Ey, papá! Esto no es un hotel, acá no se duerme…
Te levantás y te vas pensando…y cuando salís ves entrar a Erdosain con Ergueta.


Lucas Berjano

2 comentarios: